CELEBRAMOS Y HONRAMOS LA COMIDA

En México, la comida es una verdadera celebración de la cultura, un reflejo de la diversidad de sabores, colores y tradiciones que caracterizan al país. Cada rincón, cada calle, cada fiesta o festividad ofrece una oportunidad única para rendir homenaje a la gastronomía nacional en sus múltiples formas.

Ya sea en un restaurante, en el puesto de tacos a la vuelta de la esquina, en las tradicionales quesadillas de los mercados o en la calidez de una comida casera, la comida mexicana siempre está presente, adaptándose a cada contexto y a cada momento.Un claro ejemplo de cómo la comida evoluciona según la ocasión lo encontramos en el desfile del 2 de Noviembre, una de las festividades más representativas de México.

Durante esta celebración, que honra a los muertos y celebra la vida, las calles se llenan de colores, música y, por supuesto, de los más deliciosos antojitos mexicanos. Los puestos que se alinean a lo largo del recorrido ofrecen una gran variedad de opciones que nos conectan con nuestras raíces culinarias, como los elotes asados con mayonesa, queso y chile en polvo, los nachos cubiertos con todo tipo de salsas e ingredientes, las paletas de hielo, algunas bañadas en chile y otras en sabores más dulces y refrescantes, los tamales recién hechos, y los plátanos nachos, una deliciosa combinación que fusiona lo salado y lo dulce de manera única.

Cada bocado es un recordatorio de la riqueza cultural de México y de cómo la comida, más allá de ser simplemente un platillo, se convierte en una experiencia colectiva que une a las personas. Ya sea en una fiesta, un desfile, o simplemente al cruzar la calle, la comida mexicana se disfruta en cualquier momento y en cualquier lugar, adaptándose siempre a las circunstancias pero manteniendo su esencia vibrante y sabrosa.

Fotografía por Orlando Vega